Comunidad indígena en Petén, realiza análisis sobre la situación política en Guatemala
Santa Elena, Flores, Petén, julio del 2023.
Por: Un Nuevo Sol Rebelde.
El jueves 13 del mes de julio, desde horas de la mañana, vecinos de la comunidad Santa Elena Río Salinas, se dieron cita al salón comunal, donde se realizó un análisis de la situación política que atraviesa Guatemala y los efectos de las elecciones en la primera vuelta electoral.
Como resultado del análisis, surgieron inquietudes de los pobladores con relación a proyectos gubernamentales, quienes indicaron que la comunidad ha estado abandonada desde hace varios años.
Santa Elena Río Salinas es una comunidad indígena situada al sur del municipio de Sayaxché, departamento de Petén, Guatemala, y está integrada por aproximadamente 150 familias de idioma maya Q’eqchi’, la mayoría es población campesina, sobreviven de la agricultura y la pesca.
En dicha comunidad también se puede observar que no hay urbanización de calles, en las escuelas no hay escritorios: “hay un aproximado de 30 niños de educación preprimaria y una maestra que no se da abasto para atender a todos los niños” indicó Guadalupe, maestra de educación preprimaria que reside en la comunidad y lleva seis meses apoyando de forma voluntaria, impartiendo clases a los niños; ella informó a este medio que el alcalde municipal José María Cabnal, no le brindó un contrato municipal para recibir remuneración por su labor, “los niños necesitan aprender, por eso aunque no me paguen yo colaboro con la comunidad”, manifestó Guadalupe.
Empresas palmicultoras han causado criminalización en Santa Elena Río Salinas.
Santa Elena Río Salinas, ha sido fuertemente afectada por el monocultivo de palma aceitera (Elaeis guineensis). Existe un aproximado de seis empresas palmeras operando en la zona, dichas empresas además de usar los afluentes de agua depredan el bosque nativo, han desalojado familias y comunidades indígenas para la siembra de ese cultivo.
Un vecino de dicho municipio, que prefirió omitir sus datos, informó que las empresas palmeras tienen nexos con la municipalidad, por esa razón, tienen potestad para criminalizar a los habitantes: “hay comunidades que han intentado resistir a la venta de tierra, pero la empresa ha usado estrategias, con engaños han logrado grandes cantidades de tierras”. Además, comentó que existe explotación laboral, criminalización y persecución política a quiénes denuncian los malos tratos y explotación laboral.
Por otra parte, Noe Amador, quién es un líder comunitario y parte del Movimiento Social en Petén, indicó a este medio: “En el municipio de Sayaxché la población ha quedado abandonada, por la razón que en la municipalidad no han llegado personas que trabajen por el bien común, solo responden al sistema opresor”.
Además, compartió que ese tipo de actividades son importantes, para hacer el cambio en el país, son las decisiones que evitarán continuar con el saqueo de recursos, violaciones a derechos humanos, “es necesario que se realicen diversas actividades de concientización, sobre las realidades de las comunidades, porque los pueblos indígenas son los más afectados por el abandono del Estado”, indicó Amador.
En la comunidad Santa Elena Río Salinas, existe un caso de criminalización por parte de la empresa Industrias Chiquibul S.A, debido que los vecinos de dicha comunidad habrían sido despedidos sin justificación y sin indemnización correspondiente, después de trabajar para la empresa por tres o cuatro años.
De acuerdo a la información proporcionada, indicaron que se ellos se manifestaron en la exigencia de sus derechos, solicitando el pago correspondiente, no pudieron negociar, pues la empresa no estuvo de acuerdo; y en el año 2020, cuatro campesinos fueron encarcelados y tres meses después salieron bajo fianza, sin embargo, los ataques de criminalización, amenazas de despojo y persecución han continuado por parte de la empresa palmera.
Uno de los agraviados indició que “las empresas extranjeras han invadido Guatemala, nos quitaron la tierra, bajo engaño, nos ofrecieron dinero y trabajo por dos o tres años, fue mentira, nos robaron los recursos, nos discriminan y explotan laboralmente, como lo ha hecho la empresa palmera en Petén, que nos encarceló por exigir condiciones dignas y salario justo para trabajar, por esa razón nosotros estamos organizando como pueblos indígenas”.
Como parte de la organización y liderazgo que han tenido los comunitarios, se han capacitado sobre temas de empoderamiento y derechos humanos; en la actualidad están organizados, por medio de un movimiento integrado por aproximadamente 30 comunidades indígenas, que buscan solución a las problemáticas de la tierra y el agua, dicho movimiento se llama “Qana´ Ch´och”, que en idioma maya significa “Madre tierra”, por ende, desde los pueblos indígenas están conscientes sobre el derecho a la tierra.
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